Si querés podes ver el siguiente video sobre el tema:
Arcano 13: “La Inmortalidad”
Axioma Trascendente:
“La noche ha pasado y llegado el nuevo día, vístete pues con las Armas de la Luz”.
Relación:
Está relacionado con la transformación y los cambios.
Descripción de la Lámina
En este arcano, los mazos de trigo representan el Renacimiento, al igual que las flores. Las flores simbolizan el comienzo de la vida, mientras que el trigo señala el final. Un jerarca de la ley corta unos manojos de trigo, cuyos granos grandes y pequeños representan los Valores, el Capital que cada ser humano trae en sus tres cerebros: intelectual, motor y emocional.
- Quien trae granos pequeños vive poco, muriendo en los primeros días, meses o años de vida.
- Se vive por tercios y se muere por tercios:
- Quien malgasta su Capital Intelectual puede caer en la locura, esquizofrenia, etc.
- Quien malgasta su Centro Motor o de Movimiento termina paralítico, deforme, etc.
- Quien malgasta su Centro Emocional sufre enfermedades del corazón.
Este arcano tiene una representación física e interna. Es el Arcano de Judas Iscariote, que simboliza la muerte del “Ego”. La guadaña es el símbolo funeral de los Ángeles de la Muerte.
Significado Esotérico del Arcano
Realmente, la muerte es el regreso a la matriz. La vida y la muerte son dos fenómenos de una misma cosa.
- La muerte es una resta de fracciones. Al finalizar esta operación matemática, solo quedan los valores de la conciencia, mientras que los valores de la personalidad desaparecen. No existe un mañana para la personalidad del muerto; tiene un principio y un fin.
- Los valores de la conciencia están embotellados en el “Ego”, y eso es lo que continúa. El retorno de los valores es un mecanismo de la naturaleza.
- Realmente, el alma no retorna, ya que el hombre todavía no ha encarnado su alma. Solo los valores retornan.
Cuando llega la hora de la muerte, el Ángel de la Muerte asiste al lecho del agonizante para cortar el hilo de la existencia. Este hilo, llamado cordón de plata, es un vínculo misterioso de color plateado que conecta los cuerpos internos con el cuerpo físico.
- Los moribundos pueden ver al Ángel de la Muerte.
- Durante su trabajo, el Ángel adopta una figura espectral o esquelética, empuñando la guadaña.
- Fuera de sus funciones, estos ángeles pueden adoptar formas bellas, como la de niños, damas o venerables ancianos.
Los Ángeles de la Muerte trabajan bajo el Rayo de Saturno. Son sabios y no solo manejan la muerte física, sino también la muerte del “Yo Pluralizado”. Proserpina, la Reina de los Infiernos, también conocida como Hécate, es la Bendita Diosa Madre Muerte bajo cuya dirección trabajan estos ángeles.
Tres formas humanas van al sepulcro:
a) El cadáver físico.
b) El cuerpo vital o Lingam Sarira.
c) La personalidad.
El cuerpo físico se desintegra en la fosa gradualmente. El cuerpo vital, flotando como un fantasma fosforescente, también se desintegra lentamente. La personalidad, que es energética, se forma durante los primeros siete años de la infancia y no tiene un mañana tras la muerte.
- Después de la muerte, la personalidad puede permanecer en el sepulcro.
- A veces se muestra cuando alguien lleva flores o visita el panteón.
- Con el tiempo, la personalidad se desintegra en el cementerio.
Lo que no va al sepulcro es el “Ego”, el “Sí mismo”, el “Yo”, formado por una suma de defectos psicológicos. Este conjunto de “Yoes” continúa tras la muerte y es lo que retorna en los ciclos de vida.
La esencia o psiquis, lo único puro, a veces logra emanciparse por un tiempo y goza de unas vacaciones en el mundo causal antes de regresar. Sin embargo, esto es posible únicamente con la disolución del Ego.
Ciclo del Retorno:
El Ego puede tomar diferentes rutas:
- Sumergirse en el reino mineral en los mundos infiernos.
- Reencarnarse inmediatamente o tras un tiempo en un nuevo organismo.
- Aferrarse a determinados lugares o situaciones.
La única forma de romper este ciclo es mediante el trabajo consciente en la disolución del Ego.
